Una dulce personita me dijo una vez que aquello que deseamos con fuerza se acaba cumpliendo...Si me hubieran dicho hace unos meses que iba a tocar en Londres, en pleno barrio de Camden... no me lo hubiera creído. Ahora sé que algunos sueños se cumplen...
En un plis plas ya íbamos con todo el sueño del mundo conduciendo por la izquierda en esa isla tan peculiar. El rumbo era la casa de nuestra venerada mánager londinense, quien nos había organizado todo y a quien le debemos esta aventura, así que desde aquí: GRACIAS Rachel!!!!.
Una ducha, una cerveza y a correr otra vez en busca de quién???.. pues de Pachi que llegaba al aeopuerto de Stanted un ratito más tarde de nuestro alunizaje en Londres.
No miento si digo que aunque fueran las 10 de la mañana, la sensación era de que fueran como las 4 de la tarde, entre la luz de allí que cambia un poquito y que apenas habíamos dormido desde que salimos de Ciudad Rodrigo. Pues así, un poco perdidos, recogemos a Pachi que se ha cogido la juerga padre la noche anterior, ha tocado en una boda con Maggot brain, ha vuelto a cogerse otra fiesta en la boda, y recién aterrizado nos lo llevamos rumbo directo a The WheelBarrow Venue en Candem.
Y bueno, no hay mejor manera de montar que con una buena pinta de Guinnes para disimular que estamos agotados, pero como tenemos unas ganas terribles de empezar con nuestra gira británica, se nos olvidó aquello del cansancio.
¡¡¡Cómo me gustan los técnicos de sonido de las salas del Reino Unido!!!. Lo hacen todo fácil, apenas hacen un chequeo de líneas y volúmenes y ya estás escuchando todo como nunca.
Por cierto, no sé si será cosa de las instalaciones o porque mi amplificador de guitarra está hecho en Inglaterra, pero por aquellas latitudes ese cacharro sonaba como los ángeles... qué sonidazo y qué gustazo.
Cuando echo la vista atrás sobre aquel día siempre recuerdo el cansancio, las pintas de Guinness extra-cold, la carretilla en la fachada de The WheelBarrow, un puñado de españolas muy salás y una camiseta rosa de los Ramones... buen cocktail para el primer día en candem.
Segundo día y segundo concierto en “The Windmill” en el barrio de Brixton, de lo más underground que uno pueda encontrarse. Ese día tocamos con otras dos bandas, “Casino” y “First”, blues y grunge respectivamente. Toda una experiencia tocar en ese sitio, más aún cuando nos acompañaron algunos amigos (gracias Merche, gracias Luís y gracias Rachel).
Teníamos como una media hora para tocar, así que modificamos la lista de canciones, dejamos todas las más cañeras y las tocamos a toda castaña. En un abrir y cerrar de ojos los que allí estuvieron observaron a unos Hemingway Noise con toda la intención del mundo y sonando atronadores... ya se sabe por aquellos lares el espíritu de bandas como los Sex Pistols o The Clash se nos tenía que escapar por algún lado.
De ese día se nos quedaron varias cosas en la retina... las gafas y la barriga desnuda del bajista de “First”, los globos de “Casino”, el irlandés acosador de manos sucias y la cerveza Jeremiah Weed que reconstituía cuerpo y mente. Bueno y para finiquitar pues nada mejor que salir por Londres, no? Pues por ahí que nos fuimos de fiesta a encontrarnos con garitos y gente...el resto ya os lo cuento otro día...
